Los famosos NFTs
Los NFTs, o Non-Fungible Tokens, se han popularizado masivamente en el mundo digital en los últimos años pero siguen sin ser comprendidos por una gran parte de la población. Estos “activos no fungibles” representan un tipo de activo que no puede ser modificado y que, por ende, es único. Como ejemplo, una obra de arte, un cuadro único de Monet en el que pueden existir muchas copias pero hay tan solo una versión original. Los NFTs son archivos inimitables que se pueden comerciar como cualquier otro activo pero son intangibles ya que existen digitalmente y no tienen ni forma ni expresión física. El valor intrínseco de los NFTs no yace solamente en la estética o en la funcionalidad del NFT, sino, en la posibilidad de poder demostrar y certificar digitalmente que un bien pertenece exclusivamente a un individuo, y que la prueba de propiedad esté atada a una base de datos de propiedad digital (a través del blockchain).
Según JP Morgan, el valor del mercado de NFTs ha superado los 7 mil millones de dólares, en gran parte debido al crecimiento en los mercados del arte digital, música, juegos, y otros activos digitales coleccionables. Mientras que existen muchos críticos que califican el mercado de NFTs como una burbuja y sugieren que no hay un valor real en estos activos, hay quienes consideran que los NFTs y la tecnología detrás de estos activos se puede utilizar productivamente -más allá del arte digital- para la autenticación de datos y credenciales, la protección de propiedad intelectual, o la verificación de compras en línea. No obstante, hoy en día, el arte digital es el segmento más valorado del mercado de NFTs, por lo cual presentamos en este artículo una breve reseña acerca de Costa Jaguar, un proyecto de NFTs que combina arte, cultura, y sostenibilidad.
NFTs: Arte Digital & Costa Jaguar
El éxito de colecciones de NFTs como Bored Apes Yacht Club, Crypto Punks, y Crypto Kitties ha impulsado a varios emprendedores a crear sus propias colecciones con esperanzas de triunfar en el mercado del arte digital. En el último año y medio se ha visto un incremento exponencial en el número de colecciones de NFT, con cada colección luchando por flotar en un mar de imágenes. El exceso de competencia en el sector ha incentivado a las nuevas colecciones a tener características que las diferencien de las demás, con la intención de generar un mayor valor relativo para sus NFTs.
Este es el caso de Costa Jaguar, un proyecto latinoamericano propulsado por un mayor enfoque social y medioambiental. Costa Jaguar se inspira en la tradición y cultura latinoamericana, y tiene como propósito principal preservar los ecosistemas selváticos de la región. Para lograr su propósito, Costa Jaguar se ha asociado con una ONG llamada Black Jaguar Foundation, que busca plantar 1.7 mil millones de árboles nativos en la Amazonía brasileña. Dentro de la colaboración mutua establecida entre Costa Jaguar y Black Jaguar Foundation, Costa Jaguar se ha comprometido a donar el 20% de las ventas de NFTs a la ONG. De esta manera, Costa Jaguar se despega de lo abstracto y genera un impacto tangible para la sociedad, al impulsar la reforestación de la flora Amazónica con un porcentaje de sus ventas.
Hasta la fecha, varias ONGs se han mostrado desinteresadas en ingresar en el mercado de los NFTs dado que la divisa con la cual usualmente se compran y venden los NFTs, ethereum, tiene una alta huella de carbono. Sin embargo, Costa Jaguar ha reemplazado el uso de ethereum como la moneda de cambio en el proyecto y ha basado su sistema en polygon, una criptomoneda con bajo consumo de energía y más amigable para el medioambiente. La posibilidad de crear colecciones que permitan la compra y venta de tokens con polygon implica que un mayor número de organizaciones podrán unirse al mundo de los NFTs sin tener una preocupación acerca del impacto medioambiental de las criptomonedas tradicionales.
Es difícil predecir la evolución de esta nueva industria, pero el éxito de un proyecto como Costa Jaguar podría servir como precedente para el surgimiento de otras colecciones latinoamericanas con enfoques medioambientalistas e impulsará el interés de organizaciones benéficas como Black Jaguar Foundation hacia el uso del mercado de NFTs como una plataforma para la recaudación de fondos.