El gobierno colombiano y el grupo guerrillero del Ejército de Liberación Nacional (ELN) iniciaron el lunes conversaciones de paz para poner fin a más de medio siglo de guerra que ha dejado miles de víctimas.
La medida cumple una promesa de campaña del primer presidente de izquierda de Colombia, Gustavo Petro, que fue guerrillero del desaparecido M-19, y forma parte de sus llamamientos a la “paz total” con los numerosos grupos armados de la nación andina.
“Somos conscientes del profundo deseo del pueblo, la sociedad y la nación colombiana de avanzar en un proceso de paz y en la plena construcción de la democracia”, reza un comunicado conjunto publicado por los negociadores del gobierno y del ELN.
El ex guerrillero del M-19, Otty Patino, liderará el equipo negociador del gobierno, que también contará con la presencia de la Federación Colombiana de Ganaderos (FEDEGAN). El viernes, la Fiscalía General de Colombia anunció la suspensión de las órdenes de captura emitidas contra los negociadores de las conversaciones de paz del ELN.
El ELN, fue fundado en la década de 1960 por estudiantes, líderes sindicales y sacerdotes inspirados en la revolución cubana. Se cree que el grupo cuenta con unos 4.000 combatientes en Colombia, y también está presente en Venezuela, donde dirige minas de oro ilegales y rutas de narcotráfico.
Esta es la primera vez que la guerrilla del ELN se sienta a negociar con un gobierno de izquierda dirigido por el presidente Gustavo Petro, después de haber mantenido sin éxito cinco veces en el pasado negociaciones con gobiernos de derecha.
La última reunión entre las partes se celebró el 1 de agosto de 2018 en La Habana, durante el gobierno de Juan Manuel Santos, que no llegó a ningún acuerdo. Los diálogos de paz fueron interrumpidos por el expresidente Duque en enero de 2019, un día después de que el grupo perpetró un atentado en una academia de policía en Bogotá en el que murieron 21 policías y otros 68 resultaron heridos.
Duque dijo entonces que no estaba dispuesto a negociar con los rebeldes después de que estos se negaran a cesar los ataques contra la población y las fuerzas de seguridad.
La organización se convirtió en el mayor grupo guerrillero que quedaba en Colombia después de que un acuerdo de paz de 2016 disolviera las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, conocidas como FARC. Desde que se firmó el histórico acuerdo, el ELN ha aumentado sus actividades en los territorios que antes estaban bajo el control de las FARC.
Se sabe que el ELN opera en todo el territorio colombiano, así como en Venezuela, donde se cree que cuenta con el apoyo tácito de miembros del gobierno de Maduro. También se cree que la disidencia entre los miembros del ELN es frecuente, lo que podría complicar las conversaciones.
El gobierno colombiano ha expresado su preferencia por los acuerdos parciales durante las negociaciones, algo que diferencia este proceso del acuerdo con las Farc, donde los negociadores dijeron que no se acordaba nada hasta que se acordara todo.
Diplomáticos de Venezuela, Cuba y Noruega ayudarán en las negociaciones, mientras que representantes de Chile y España las observarán. Las negociaciones anteriores, algunas de las cuales se remontan a los años 90, han fracasado.