El precio de los huevos en México está por las nubes. Los brotes de influenza aviar tanto en México como en EE UU, aunado a la especulación, han llevado las cotizaciones del blanquillo a niveles históricos, por encima de los 50 pesos por kilo. Un análisis del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) da a conocer que durante la primera semana de febrero el huevo blanco en supermercados se cotizó en 53,05 pesos el kilo, mientras que la misma cantidad de huevo rojo se cotizó en 56,33 pesos.
El alza en este alimento de la canasta básica también tocó precios máximos en los principales mercados de abasto de las principales ciudades de México. En la Central de Abasto de la capital el kilo de huevo al menudeo llegó a los 46 pesos, un incremento del 39% respecto a la primera semana de febrero de 2022, de acuerdo con las cifras del Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SNIIM) de la Secretaría de Economía. El aumento de precios ha sido generalizada en el país, en Guadalajara el kilo de huevos en los mercados se cotiza actualmente en 47 pesos —50% más caro que el año pasado— y en Monterrey el precio llegó a un máximo de 43 pesos en las centrales de abasto.
Juan Carlos Anaya, director general de GCMA prevé que el precio del huevo seguirá al alza durante el mes de febrero y comenzar a descender a mediados de marzo. “De acuerdo con la estacionalidad, a principios de abril siempre aumenta la producción de huevo y al aumentar la oferta tiende a bajar el precio”, específica.
César de Anda, expresidente de la Comisión Internacional del Huevo, explica que el encarecimiento en este producto es parte de un efecto multiplicador, derivado de los contagios de influenza aviar en EE UU, Europa y Japón, principalmente. El empresario detalla que el incremento anual en los costes del huevo forman parte de una tormenta perfecta de factores, desde la pandemia hasta la guerra en Ucrania. “Esto es temporal, es cuestión de que EE UU empiece a reflejar precios bajos al consumidor, que ya se están viendo, para que también empiecen a notarse en México”, avizora.
En EE UU el impacto de la influenza aviar en la mortandad de aves y en el precio final al consumidor ha sido mayor. Desde el comienzo del primer brote en EE UU, en febrero de 2022, el número ya ha alcanzado los 731 en su territorio nacional, llegando a 47 de los 50 Estados. El país ha contabilizado una cifra récord de aves sacrificadas: 57,9 millones y el precio del huevo se ha incrementado un 109%, hasta alcanzar los 123 pesos por kilogramo. Ante un alza tan desproporcionada, en la frontera se han registrado intentos de cruces clandestinos de huevos. “Aunque los vasos comunicantes no son tan cercanos como en otras industrias, porque México no exporta huevo fresco para plato a la Unión Americana, ha habido contrabando hormiga, lo cual no es permitido por cuestiones sanitarias”, zanja De Anda.
Aunque en México la influenza aviar se dice controlada, los productores mexicanos sacrificaron cerca de 5,6 millones de aves, la mayoría de postura, en 29 unidades de producción avícola comercial en los Estados de Nuevo León, Jalisco, Yucatán y Sonora. Sin embargo, solo representan el 0,3% del inventario nacional.
Ante los brotes de la enfermedad, actualmente, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) mantiene unidades productoras en cuarentena solo en Yucatán. Las autoridades sanitarias registraron el primer caso de influenza aviar el pasado 14 de octubre en un ave silvestre en Metepec, Estado de México.
México es el cuarto productor mundial de huevo con 3,1 millones de toneladas y prácticamente es autosuficiente para cubrir el total de sus necesidades de abasto, importando solo en algunas ocasiones pequeños volúmenes para algunas ciudades fronterizas con EE UU.
Las autoridades sanitarias del Gobierno de López Obrador autorizaron la aplicación de más de 140 millones de dosis de vacunas en unidades de producción comerciales en zonas de alto riesgo zoosanitario y en granjas donde existen gallinas progenitoras y reproductoras. El organismo prevé concluir la vacunación a finales del próximo mes de marzo. Las medidas de vacunación previnieron la caída en la producción de huevo, de manera que la oferta y el abastecimiento es regular.
La escalada de precios en el huevo, un producto esencial en la dieta alimenticia del territorio—México es el principal consumidor de huevo per cápita en el mundo, con 23 kilogramos por habitante al año— se da en un entorno en donde la inflación en alimentos ha sido la más alta de los últimos 20 años. Hasta la primera quincena de enero, la inflación a tasa anual llegó al 7,9%, un repunte respecto a quincenas previas a pesar de las medidas que ha implementado la Administración federal para intentar frenarla.