La inversión proveniente de Latinoamérica a España no ha dejado de crecer en los últimos años. En 2023, en particular, el capital desembolsado desde el nuevo continente aumentó un 138%. No obstante, son contados los países que van aglutinando peso sobre este capital. México es el ejemplo más claro. Son 245 empresas mexicanas quienes representan el 44% del total de firmas con capital mayoritariamente latinoamericano implantadas en España.
El podio lo completan, en este orden, firmas chilenas, (15%) y de Brasil (11%). Esta es una de las conclusiones de un estudio elaborado por el Instituto Complutense de Estudios Internacionales (ICEI), junto al Consejo Empresarial Alianza para Iberoamérica (CEAPI) que destaca —y al mismo tiempo advierte— de la elevada concentración de los flujos de inversión directa en Iberoamérica.
Para el ICEI, la cifra es una clara señal de aviso. “Existe margen de acción para una mayor diversificación geográfica de los flujos de inversión en el contexto de ambas regiones”, aconseja en el informe presentado esta martes en Madrid. Con una diferencia notoria, se sitúan las economías de Argentina, Uruguay, Colombia y Venezuela, cuya participación en España en ningún caso supera el 5% de la muestra. El estudio también expone que el 15% de las firmas mexicanas proveen servicios de consultoría en el sector eléctrico, así como en las comunicaciones; y una cantidad semejante se dedican a las manufacturas. Destaca la participación de Chile y Argentina en el sector de la distribución y comercio, cuyo peso ronda el 30% para ambos países.
Este mismo mes, un informe del Instituto Español de Comercio Exterior (Icex) y la Secretaría General Iberoamericana (Segib) detallaba que México acapara 33.096 millones de euros en inversiones desde 1993, lo que equivale a un 49,5% del total de capital proveniente de América Latina. En 2023 se llegó incluso a superar esa cantidad, con un 58% del capital llegado desde esta región, puntualmente 1.645 millones de euros. Esto convierte al Estado gobernado por Andrés Manuel López en el primer país de renta media por volumen de inversiones en España, superando a China, la segunda economía mundial.
En la muestra de empresas latinoamericanas con presencia en España que recoge el ICEI predominan las empresas grandes y medianas. Las de amplias plantillas son dominantes en el ámbito manufacturero o minero, mientras que las de tamaño medio sobresalen en el sector servicios, especialmente en la educación y en el segmento administrativo. Las de pequeño tamaño, por su lado, se alinean en torno al comercio y a las actividades científicas, según el estudio.
Visto por sectores, las firmas que se dedican a la distribución y al comercio son las más multitudinarias, con un total de 78 empresas; seguido por el ámbito de la manufactura y, en tercer lugar, el sector inmobiliario, que registra 48 entidades. Este último segmento ha experimentado un explosivo crecimiento en los últimos años. Si en 2022 se destinaban 128,5 millones de euros provenientes de América Latina a este ámbito de la economía, para 2023 ese monto se triplicaba hasta los 497 millones, especialmente en ciudades como Madrid, que concentra gran parte del caudal proveniente desde Latinoamérica.
Según el CEAPI, en los últimos años se está produciendo un “efecto llamada” entre las élites de América Latina, tanto por la buena acogida de los negocios en España, así como por el constante flujo de hijos de empresarios que acuden a formarse en el país. El futuro no está, pese a todo, exento de retos y dificultades. En concreto, Isabel Álvarez, coordinadora del estudio, cita dos muros a flanquear. Primero, las tensiones geoestratégicas que han alterado las rutas de comercio y tensado los mercados. Y en segundo lugar, el marco jurídico y regulatorio, que según el 80% de las empresas del estudio se considera un aspecto “muy importante” para garantizar el cumplimiento de la ley de los contratos.