López Obrador es acusado por su oposición política de centralizar el poder en una purga de tecnócratas “neoliberales”.
El partido gobernante de México, Morena, pospuso abruptamente un plan para fusionar los reguladores de telecomunicaciones, energía y la autoridad de competencia tras una avalancha de críticas. El plan consistía en combinar el regulador de energía CRE, el organismo de control antimonopolio la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE), y el regulador de telecomunicaciones IFT.
Ricardo Monreal, senador que hizo pública la iniciativa la semana pasada, anunció el domingo en sus redes sociales que la propuesta se dejaba en suspenso para su posterior discusión.
El gobierno había dicho que la propuesta de crear un Instituto Nacional de Mercados y Competencia para el Bienestar, o Inmecob, ahorraría 500 millones de pesos (22 millones de dólares).
El presidente Andrés Manuel López Obrador, que no oculta su desprecio por los tecnócratas neoliberales, a quienes culpa de perpetuar la pobreza y las divisiones sociales, apoyó la iniciativa diciendo: “Si esto ayuda a reducir el gasto… Estoy a favor, porque hubo muchos excesos en la creación de agencias, muchas eran innecesarias y casi todas eran muy costosas”.
Pero los críticos dijeron que la propuesta era menos sobre la austeridad que sobre la centralización del poder. Señalaron el hecho de que se permitiría al presidente nombrar funcionarios de una lista de nombres sugerida por el Senado, saltándose el riguroso procedimiento de selección independiente del regulador de telecomunicaciones y el organismo de control de la competencia. El regulador de energía ya se consideraba ampliamente bajo control gubernamental.
“Esto es muy peligroso. La justificación de que esto ahorrará dinero y será más eficiente no es creíble”, dijo Vanessa Rubio, ex subsecretaria de hacienda y ahora senadora del PRI. “Creo que esto muestra lo que Morena piensa acerca de los sistemas de salvaguardias y contramedidas.”
Monreal respondió: “La intención no es crear una superpotencia ni dar paso al autoritarismo ni concentrar las funciones de estas instituciones dentro del gobierno, y menos aún eliminar su autonomía”, dijo.
Pero para permitir una discusión completa de la propuesta, dijo que había pospuesto la presentación de la iniciativa en el Congreso.
La iniciativa surgió después de que el gobierno intentara el mes pasado imponer nuevas reglas para que el sector eléctrico diera prioridad a la empresa estatal a expensas de los generadores privados, especialmente los renovables.
El presidente López Obrador quiere un sector energético estatal fuerte y cree que las empresas privadas han disfrutado de privilegios inaceptables.
La ofensiva eléctrica, impuesta al regulador de energía y operador de la red Cenace, ha sido suspendida hasta que se resuelvan un cúmulo de requerimientos judiciales, lo que podría llevar meses. Se espera que pronto se presenten más requerimientos contra el aumento de las tarifas.
“No me importaría si fuera realmente una cuestión de austeridad, pero sí si implica quitar toda la autonomía y los dientes de estas instituciones, que nos llevaron décadas construir”, dijo Arie Ellstein, un consultor político en entrevista para Reuters
López Obrador también ha planteado la idea de una renovación del sistema privado de pensiones del país. Los expertos coinciden en que muchos mexicanos no tendrán suficientes contribuciones para poder jubilarse cómodamente. “Si no hacemos nada, los que se jubilen no recibirán ni siquiera el salario mínimo, recibirán la mitad de lo que deberían, como mínimo”, dijo el presidente.
Todavía no ha explicado sus planes, pero dijo que pretendía “corregir el error de estos irresponsables tecnócratas, que se creían científicos, que nos metieron en todo tipo de problemas”.
En medio de la crisis de Covid-19, Morena también ha propuesto que se permita a la gente aprovechar los fondos de jubilación anticipada. Ante la perspectiva de una severa contracción económica y la caída de los ingresos fiscales, “podrían verse tentados a hacer algo como lo que hizo Cristina Kirchner con los fondos de pensiones”, dijo un economista que pidió no ser nombrado, refiriéndose a la nacionalización de Argentina en 2008.
AMLO criticó un reportaje del periódico El Universal que sugería que estaba planeando hacerse cargo del sistema ferroviario, diciendo que el reportaje pretendía “sembrar miedo, crear incertidumbre, continuar con este estribillo de que somos comunistas, que estamos actuando como Venezuela. …es completamente falso”.
La iniciativa de Inmecob se enfrentaría a un duro viaje al Congreso. Como representaría una reforma constitucional, el gobierno necesitaría el apoyo de dos tercios de ambas cámaras, que el presidente no tiene. Pero el presidente se enorgullece de su terquedad.
“Mi temor es que Morena intente cooptar al PRI en el Senado para aprobar esto”, dijo Alejandro Schtulmann, director de la consultora Empra.
Sin embargo, incluso algunas figuras cercanas al gobierno instaron a la cautela.
“Los órganos autónomos de competencia y regulación se enfrentan a actores muy poderosos del mercado”, tuiteó Gerardo Esquivel, nombrado AMLO para el consejo del banco central. “Por eso debemos pensar en cómo fortalecerlos para que puedan hacer mejor su trabajo, no debilitarlos
