La variante altamente infecciosa del coronavirus que ha surgido en el sudeste de Inglaterra se está extendiendo rápidamente al resto del Reino Unido y ya está presente en otras partes del mundo, advirtieron científicos el domingo.
La Organización Mundial de la Salud dijo que su Grupo de Trabajo de Evolución está trabajando estrechamente con las autoridades médicas del Reino Unido para entender cómo la variante, denominada B.1.1.7, afectará el curso de la pandemia. Por ahora, se ha detectado en los Países Bajos, Dinamarca y Australia.
Varios científicos afirman que dos aspectos de B.1.1.7 son motivo de preocupación. Uno es el número sin precedentes de mutaciones que conlleva. El otro es la velocidad con la que está suplantando a otras cepas del virus Sars-Cov-2 en Inglaterra.
Jeffrey Barrett, director de la Iniciativa de Genómica Covid del Instituto Wellcome Sanger, aseguró que 23 letras del código genético del virus habían cambiado, de las cuales 17 podrían afectar el comportamiento del virus, en particular ayudándolo a entrar y propagarse dentro de las células humanas.
“Esta nueva variante es muy preocupante y no se parece a nada de lo que hemos visto hasta ahora en la pandemia”, dijo.
Hasta ahora no hay pruebas de que las mutaciones estén afectando el curso de la enfermedad en personas infectadas con B.1.1.7 o la eficacia de las vacunas Covid-19 en desarrollo.
“Las tasas de hospitalización han aumentado recientemente [en el sureste de Inglaterra], pero más o menos en línea con el aumento del número de casos, lo que no indica que la nueva cepa provoque síntomas más graves”, dijo François Balloux, director del Instituto de Genética de la University College London.
“Me sorprendería mucho si surgiera alguna evidencia de que crea síntomas más graves”, añadió el profesor Balloux. “Tampoco es una cepa que deba poder escapar a la protección que proporciona la inmunización por las vacunas actuales o una infección previa”.
Sin embargo, Kristian Andersen, director de genómica de enfermedades infecciosas en el Instituto de Investigación Scripps en California, dijo: “He visto muchos artículos que afirman que no hay efecto en la inmunidad o en las vacunas o en las características clínicas. Eso no es correcto… El hecho es que no lo sabemos, pero lo sabremos en las próximas semanas”.
El aumento de la infecciosidad de la variante queda ilustrado por el hecho de que, después de aparecer en Kent el 20 de septiembre, fue responsable del 28% de las infecciones en Londres a principios de noviembre y del 62% en la semana que terminó el 9 de diciembre.
Los modelos computarizados sugieren que la cepa es un 70% más transmisible que otras cepas de Sars-Cov-2 que circulan en el Reino Unido y eleva el valor R -el número medio de personas a las que alguien con Covid-19 transmite la infección- en 0,4, lo que hace que la pandemia sea mucho más difícil de controlar sin medidas estrictas de bloqueo.
Según un estudio publicado el sábado por el Consorcio de Genómica Covid-19 del Reino Unido, los laboratorios han secuenciado 1.623 genomas virales Sars-Cov-2 que muestran la variante B.1.1.7. Estos incluyen 519 en Londres, 555 en Kent, 545 en otras regiones del Reino Unido, incluyendo Escocia y Gales, y cuatro en otros países.
Las pruebas regulares de Covid-19 no detectan mutaciones virales. Las variantes sólo pueden identificarse mediante la lectura de las 30.000 letras del código genético de cada muestra de Sars-Cov-2 utilizando máquinas secuenciadoras especializadas.
“El Reino Unido y Dinamarca son los secuenciadores más regulares y prolíficos del mundo”, señaló Emma Hodcroft, genetista viral de la Universidad de Berna (Suiza). “Así que la variante podría estar en otro lugar y no ser detectada todavía. Unos esfuerzos de secuenciación más coordinados a nivel regional y mundial nos ayudarían a controlar las variantes”.
Todos los virus mutan y B.1.1.7 no es la primera variante que causa preocupación. Entre los ejemplos se incluye la mutación D614G que surgió al principio de la pandemia y que aumenta moderadamente la transmisibilidad de Covid-19. Esa cepa se propagó desde España al resto de Europa durante el verano. La mutación Y453F surgió en el Visón danés, pero que no se ha extendido ampliamente en otros países.
La cepa que ahora causa más preocupación internacional, además de B.1.1.7, es una variante diferente en Sudáfrica llamada 501.V2. El profesor Salim Abdool Karim, titular del programa Covid-19 del país, dijo el viernes: “No esperábamos la rapidez con la que esta variante se ha convertido en dominante en Sudáfrica. Estamos encontrando que entre el 80 y el 90% del virus es este mutante de 501.V2”.
El profesor Karim dijo 501. V2 está aumentando la “carga viral” – la cantidad de virus presente en los pacientes – “lo que puede traducirse en una mayor eficiencia de la transmisión”. Los hallazgos preliminares en el Reino Unido sugieren que B.1.1.7 está teniendo un efecto similar.