Con la voz quebrada, entre lágrimas, Tatiana Clouthier, secretaria de Economía de México, ha anunciado su renuncia al cargo en la conferencia matutina en Palacio Nacional. “Me tocó jugar en las grandes ligas y hay que saber cuándo retirarse, me voy al club donde seguiré al equipo con ánimo”, dijo Clouthier al anunciar al presidente, Andrés Manuel López Obrador, su salida de la secretaría de Economía.
Exdiputada y otrora miembro del opositor Partido de Acción Nacional (PAN) de centro derecha, Clouthier se alió después con el izquierdista López Obrador y jugó un papel importante al ayudar a dirigir su campaña a la presidencia en 2018.
Clouthier asumió su cargo después de que la anterior ministra de Economía de López Obrador, Graciela Márquez, se fuera después de dos años para unirse a la agencia nacional de estadísticas de México.
La titular de la Secretaría de Economía declaró “ya no puedo aportar más al proyecto de la 4T” y sale del gabinete luego que se cumplió el período de consultas sin llegar a algún acuerdo con EEUU.
La renuncia de Tatiana Clouthier priva a México de uno de sus negociadores comerciales clave en medio de una importante disputa con Estados Unidos y Canadá centrada en la energía.
La exministra no explicó los motivos de su renuncia.
Washington y Ottawa exigieron en julio las conversaciones, argumentando que las políticas de López Obrador incumplían un acuerdo comercial regional y discriminaban a los inversores estadounidenses y canadienses al dar prioridad a las empresas energéticas mexicanas estatales.
La Secretaría de Economía de México ha liderado las negociaciones de resolución de disputas con Estados Unidos y Canadá, que están molestos por las políticas energéticas de López Obrador.
Esta semana concluyó el plazo de consultas públicas entre los gobiernos de México y Estados Unidos para tratar de resolver las diferencias comerciales en torno a la política energética del gobierno de AMLO y su posible violación al T-MEC, situación que les tiene a la puerta de un panel internacional, que en caso de perder, México debería cubrir una sanción que alcanzaría miles de millones de dólares.
“Respetamos su decisión”, dijo López Obrador. “Insistimos en que se quede, pero es una mujer con convicciones”.
El viernes se anunciará un sustituto, dijo.