México quiere restringir las actividades de los agentes extranjeros después de que el arresto del ex general Cienfuegos en Los Ángeles provocara una tensión diplomática con los Estados Unidos.
El presidente Andrés Manuel López Obrador envió un proyecto de ley a los senadores para modificar la ley de seguridad nacional con el fin de ayudar a regular la presencia de agentes extranjeros en México para que actúen en el marco de la cooperación bilateral, dijo en Twitter Ricardo Monreal, el líder de Morena el Senado.
Según un resumen en el sitio web personal de Monreal, la propuesta tiene por objeto regular las actividades de los organismos de seguridad extranjeros en México. Limitaría a los agentes extranjeros a actividades de enlace para el intercambio de información con las autoridades mexicanas. Los agentes extranjeros no gozarían de inmunidad por delitos o por sobrepasar los límites de su autoridad.
Las propuestas regularán “una reivindicación de larga data sobre la presencia y participación de agentes extranjeros en México”, dijo Monreal en su cuenta oficial de Twitter.
Obligarían a los agentes a entregar cualquier información que recogieran al gobierno y a producir un informe mensual sobre lo que han estado haciendo. También requeriría que las autoridades locales mexicanas o los empleados federales informaran al gobierno de cualquier reunión o llamada telefónica con agentes extranjeros.
“El reclutamiento de informantes puede llegar a un punto muerto, lo que sería más perjudicial para México que para los EE.UU.”, dijo Mike Vigil, ex jefe de las operaciones internacionales de la DEA, en una entrevista. “Tenemos una gran estructura de informantes en México. Muchas veces salimos en operaciones con funcionarios del gobierno mexicano. No hacemos el arresto, trabajamos bajo la cobertura de coordinación y bajo los auspicios de las fuerzas de seguridad. Todo eso se acabaría”.
La administración de López Obrador fue sorprendida cuando el ex Secretario de Defensa, el general Salvador Cienfuegos, fue arrestado en los Estados Unidos por cargos que incluían tráfico de drogas y lavado de dinero. El Secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard dijo que los EE.UU. violaron un pacto de 1992 que requería que México fuera notificado de la investigación, y por eso la nación amenazó con cortar la cooperación con los EE.UU.
Más tarde, los Estados Unidos desestimaron su caso contra Cienfuegos, permitiéndole regresar a su país de origen. Los fiscales dijeron en una presentación en la corte que consideraciones sensibles e importantes de política exterior pesaban más que el interés del gobierno en llevar a cabo la acusación.
La propuesta de enmienda tiene “implicaciones para la seguridad nacional, ante el riesgo de violaciones de la soberanía y el orden constitucional”, según su sitio web.