Alonso Ancira, ex presidente del Consejo de Administración de Altos Hornos de México, S.A. (AHMSA), se encuentra en la cárcel de Palma de Mallorca (Islas Baleares) bajo la custodia española, acusado por delitos de cohecho, blanqueo de capitales, fraude y incluso desvío de recursos públicos.
Las investigaciones de Ancira comenzaron entre junio y noviembre de 2012, cuando su empresa AHMSA realizó transferencias de 3.4 millones de dólares a la empresa Tochos Holding, ligada con el ex director general de Petróleos Mexicanos (PEMEX), Emilio Lozoya. Tiempo después, Lozoya adquiere un inmueble de alto valor en la zona residencial en la Ciudad de México.
Posteriormente, Lozoya al ser director general de PEMEX, compra una planta completamente obsoleta e inactiva propiedad de AHMSA, la cual tenía el objeto social de producir fertilizantes. Dicha compraventa se realizó por 275 millones de dólares, siendo el precio cuatro veces mayor del valor de mercado.
Por lo anterior, se le atribuye a Ancira una cooperación con Lozoya de lavado de dinero, mediante el cual pretendían introducir dinero de procedencia ilícita en la actividad económica que les caracterizaba. Primero de AHMSA hacia Tochos, y después la contraprestación de Lozoya a la empresa de Ancira.
Ahora bien, Ancira dentro de su proceso judicial en España, presentó como medio de defensa el recurso de súplica para evitar su extradición. Dicho recurso se sustenta en el Artículo 24.1 de la Constitución Española y en el Artículo 236 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
Sin embargo, el Pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional española rechazó el recurso por unanimidad de 20 Magistrados y confirmó su entrega a las autoridades mexicanas por concurrir en el principio de doble incriminación.
Lo que queda ahora es esperar que el Consejo de Ministros del gobierno español confirme su extradición. Una vez confirmado, Ancira se regresará a México para enfrentar un proceso penal.