El presidente Andrés Manuel López Obrador retrasó un proyecto de ley que prohibiría la mayoría de las subcontrataciones en México después de que las cámaras empresariales advirtieran que sería desastroso para la economía.
López Obrador firmó un acuerdo con los sindicatos y los líderes empresariales en su conferencia de prensa matutina del miércoles para buscar negociaciones sobre el proyecto de ley, actualmente en el Congreso, hasta la sesión legislativa de febrero. Esas negociaciones incluyen la posibilidad de poner un tope a las tasas de participación en las ganancias de las empresas para que les resulte menos oneroso contratar trabajadores directamente, dijo.
AMLO ha dicho que la subcontratación permite a las empresas mexicanas limitar las obligaciones del empleador y evadir impuestos. El proyecto de ley sólo permitiría la subcontratación para trabajos especializados que una empresa no hace por sí misma, como el mantenimiento o la construcción. Pero ha enfrentado una resistencia significativa de las empresas, lo que ha suscitado preocupaciones sobre la forma en que las compañías absorberán los 4,6 millones de trabajadores que actualmente están siendo subcontratados, especialmente durante la crisis más grande de la nación en casi un siglo.
“Hemos decidido después de las peticiones de diálogo y consulta hechas por el sector empresarial y también por el sector laboral, iniciar un proceso para llegar a un acuerdo pronto”, dijo López Obrador. “Nada puede ser impuesto, nada por la fuerza, todo por la razón y la ley.”
Los representantes de los empresariales han sido muy claros en sus críticas al proyecto de ley. Carlos Salazar, el director de una de las cámaras empresariales más grandes del país, CCE, comparó la legislación con la tala de árboles para quitar una manzana podrida. Elías Micha, el jefe de una asociación de negocios de outsourcing, dijo en una entrevista con el periódico La Jornada que el proyecto de ley sería “devastador”.
Desde entonces, Salazar ha aceptado negociar con el gobierno y firmó el acuerdo el miércoles.
La Secretaria de Trabajo Luisa María Alcalde ha dicho que el número de trabajadores subcontratados ha crecido exponencialmente desde 2012. También mencionó el ejemplo de un hotel en el que sólo dos de los 802 trabajadores eran empleados reales. Catorce empresas de subcontratación pagaron al resto.
Las empresas han sugerido poner un límite a la cantidad de beneficios que van a los trabajadores bajo las reglas de participación de beneficios existentes en México como compensación. Actualmente, el 10% de las ganancias deben ser distribuidas a los trabajadores, lo que las empresas argumentan que podría equivaler a varios años de salarios en algunos casos. En el acuerdo del miércoles, el gobierno, los sindicatos y el sector empresarial dijeron que los posibles cambios en la participación de las ganancias eran todavía demasiado vagos, y que debían ser discutidos más a fondo.