Elon Musk puede ser inescrutable, y sus ideas políticas son elusivas, lo que ha hecho complicado saber qué hará exactamente el multimillonario ahora que compró Twitter. Pero en las últimas semanas y meses, a medida que el acuerdo con la empresa se aproximaba, Musk ha dado más pistas sobre lo que él cambiaría de Twitter en entrevistas, documentos regulatorios y, por supuesto, en su cuenta de la red social.
Estas son las áreas mas importantes en las que Musk se centrará:
Libertad de expresión y moderadores de contenidos. A menudo, Musk ha expresado su preocupación de que los moderadores de contenido de Twitter se extralimitan e intervienen demasiado en la plataforma, que él ve como la “plaza pública de facto” de internet.
Volvió a mencionar esas preocupaciones en el comunicado que anunciaba el acuerdo: “La libertad de expresión es la base de una democracia funcional, y Twitter es la plaza pública digital donde se debaten asuntos vitales para el futuro de la humanidad”, dijo Musk.
“También quiero que Twitter sea mejor que nunca al optimizar el producto con funciones nuevas, haciendo que los algoritmos sean de código abierto para aumentar la confianza, combatir a los bots de spam y autentificar a todos los usuarios humanos”, agregó. “Twitter tiene un enorme potencial; espero trabajar con la empresa y la comunidad de usuarios para liberarlo”.
En un tuit del lunes, antes del anuncio de su acuerdo con Twitter, Musk dijo que esperaba que incluso sus “peores críticos” continuaran usando la plataforma “porque eso es lo que significa la libertad de expresión”.
La pregunta sobre Trump. Musk no ha comentado públicamente cómo manejará el asunto de la cuenta de Twitter del expresidente de Estados Unidos Donald Trump que fue suspendida de manera permanente. Pero sus comentarios sobre la libertad de expresión han avivado la teoría de que Twitter, bajo su propiedad, podría reincorporar a Trump, a quien se le prohibió el acceso a la plataforma el año pasado. Después de los disturbios del 6 de enero en el Capitolio, Twitter anunció que Trump había violado sus políticas al incitar a la violencia entre sus seguidores. Facebook también suspendió a Trump por la misma razón.
El exmandatario, conocido por publicar tuits en los que critica a opositores y, en ocasiones, anunciaba cambios de política pública, está tratando de iniciar su propia red social. Su empresa emergente, Truth Social, ha tenido problemas para atraer usuarios, y podría ser más difícil ahora que Musk ha sugerido que cambiará las reglas de moderación de contenido en Twitter. Trump dijo en una entrevista reciente que probablemente no volvería a unirse a Twitter.
El algoritmo. En una conferencia TED de este mes, Musk explicó sus planes para hacer que el algoritmo de la compañía siga un modelo de código abierto, lo que permitiría a los usuarios ver el código que muestra cómo ciertas publicaciones surgieron en sus líneas del tiempo.
Y aseguró que el método del código abierto sería mejor que “tener tuits que se promocionan y desvanecen misteriosamente sin tener idea de lo que está pasando”.
Musk también ha señalado la politización de la plataforma en el pasado, y recientemente tuiteó que las políticas de cualquier plataforma de redes sociales “son buenas si el 10 por ciento más extremista de izquierda y la derecha están descontentos por igual”.
Quién usa la plataforma y cómo. Antes de que Musk se ofreciera a comprar Twitter este mes, había expresado su preocupación por la relevancia de la red social.
Cuando una cuenta publicó una lista de las 10 cuentas de Twitter más seguidas —en donde el expresidente Barack Obama y las estrellas pop Justin Bieber y Katy Perry estaban incluidos—, Musk replicó: “La mayoría de estas cuentas ‘principales’ tuitean rara vez y publican muy poco contenido. ¿Se está muriendo Twitter?
El jueves, el director ejecutivo de Tesla prometio en un tuit que “derrotaría a los bots o moriría en el intento”.