Del ámbito financiero a la transición energética, la próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha elegido a perfiles de su entera confianza para asumir las riendas de la cartera de Energía en el próximo sexenio. El más reciente nombramiento de Víctor Rodríguez Padilla como director de Petróleos Mexicanos (Pemex) confirma la apuesta de Sheinbaum por un equipo técnico y con un amplio bagaje académico para asumir las riendas tanto de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) como de Pemex, la petrolera más endeudada del mundo, con un pasivo cercano a los 100.000 millones de dólares
A casi tres meses de ganar las elecciones presidenciales, la próxima presidenta de México, ha dado a conocer al último alfil de su cartera energética. Rodríguez Padilla asumirá la encomienda con el respaldo de tener una trayectoria académica similar a la de la próxima inquilina de Palacio Nacional, aunque sin apenas experiencia operativa sobre el terreno. Egresado de la carrera de Física −como Sheinbaum−, el próximo director de Pemex cuenta con 42 años de experiencia en el sector energético, un puñado de publicaciones y vastas asesorías en el Poder Legislativo. De 2022 a la actualidad se desempeñaba como asesor de análisis de información de Laura Castillo, consejera independiente de Pemex. El científico dejará las aulas como profesor de la UNAM y las asesorías alejadas de los reflectores, para hacer frente a una petrolera agobiada por los adeudos y la extracción de crudo a la baja.
“Nos conocemos hace muchísimos años, tenemos la misma carrera, aunque estudiamos en distintos lugares el doctorado. Estudió Física en la Facultad de Ciencias de la UNAM. Quizá fue el primer físico que se fue a hacer la maestría en Ingeniería en Energía y tuvimos maestros similares”, destacó este lunes Sheinbaum sobre Rodríguez Padilla. En su primer acercamiento con la prensa, el físico y doctor en Economía de la Energía en la Universidad de Grenoble ha defendido a la paraestatal y ha asegurado que tenderán las manos con empresas y con la academia para robustecer el portafolio de proyectos de energías renovables. “En ese sentido, no nos apartamos del guion que ha seguido Pemex a lo largo de su historia, Pemex es una empresa pública al servicio de los mexicanos, al servicio de la Patria y lo seguirá siendo”, afirmó.
El reto es mayúsculo. Rodríguez Padilla tendrá que encontrar un cauce de salida a una deuda financiera de 99.400 millones de dólares. Además, de la renegociación con proveedores por otros 29.000 millones de dólares y un pasivo laboral cercano a 80.000 millones de dólares. En el flanco operativo, este año, Pemex llegó a su peor nivel operativo en 45 años, con una producción de 1,5 millones de barriles diarios. Este lunes, Sheinbaum ha asegurado que en su mandato la extracción será de 1,8 millones de barriles diarios, cifra suficiente para abastecer a las refinerías del país y alcanzar la tan ansiada soberanía energética.
La nueva dirección de Pemex pretende, a la par, reducir los elevados costos de operación, así como expandir su portafolio de proyectos a las energías renovables, eólica, solar y el litio. Para ello, Rodríguez Padilla aseguró que se buscarán asociaciones con empresas y académicos, pero mantendrán el eje rector del Estado. “Es una excelente noticia porque es un experto en energía, que podrá consolidar el segundo piso de la cuarta transformación en Pemex”, asegura Lorenzo Meyer Falcón, consejero independiente de Pemex.
Aunque el especialista en temas energéticos, Gonzalo Monroy, coincide en la amplia trayectoria académica de Rodríguez Padilla, advierte que no cuenta con experiencia operativa, sobre el terreno y que podría ser una desventaja al momento de asumir las riendas de la paraestatal a partir del próximo 1 de octubre. “El gran problema de llevar a un perfil académico a esta dirección es que no contará con el poder para contravenir las decisiones de lo que digan los operativos de la compañía”, afirma.
En la misma línea de la técnica, Sheinbaum ha optado para la CFE por alguien de casa, quien ha forjado su carrera en los pasillos de la paraestatal eléctrica: Emilia Esther Calleja Alor. La ingeniera electrónica por el Instituto Tecnológico de Celaya cuenta con más de 21 años de experiencia técnica en materia de generación en la CFE y hasta hace unas semanas era la directora de la subsidiaria de la CFE, Generación l, siendo también la primera mujer en ocupar ese cargo. Al igual que en Pemex, la CFE también tiene desafíos financieros de peso por resolver: solo en el segundo trimestre del año, la CFE reportó pérdidas por más de 76.000 millones de pesos, según el reporte en la Bolsa Mexicana de Valores.
Finalmente, a la cabeza de este equipo, estará la secretaria de Economía, Luz Elena González Escobar, economista especializada en finanzas y medio ambiente, quien ha trabajado por más de 20 años mano a mano con la próxima inquilina de Palacio. A lo largo de su carrera pública ha participado en programas de movilidad sostenible como las rutas de transporte con gas natural y vehículos interconectados a la red eléctrica, además de los sistemas Cable Bus y Tren Suburbano que conectan al centro de la ciudad con la periferia. La próxima secretaria de Energía tendrá la oportunidad de poner orden en la cartera energética y reconducir la planeación en uno de los sectores estratégicos del país.